Ingredientes:
2 dientes de ajo
3 cebolletas
5 tomates rojos para cocinar
aceite de oliva virgen extra
sal marina
2 cucharadas de azúcar
una hoja de laurel
media cucharadita de pimentón ahumado dulce
media cucharadita de pimentón ahumado dulce
2 guindillas secas
Elaboración:
Ponemos en una cazuela 2 cucharadas de aceite de oliva. Pelamos los ajos y los cortamos en láminas. Los dejamos en la cazuela. Lo ponemos a hacer a fuego bajo.
Pelamos las cebolletas y las cortamos en gajos finos. Subimos el fuego y cuando empiecen a dorarse los ajos añadimos las cebolletas. Agregamos una pizca de sal y dejamos que se haga a fuego medio con la tapa puesta.
Lavamos los tomates y los rallamos. Añadimos las guindillas enteras. Dejamos que se haga unos 10 minutos a fuego lento.
Sacamos las guindillas y añadimos el tomate. Rectificamos de sal y agregamos la mitad del azúcar. Removemos y añadimos el laurel. Dejamos que se haga unos 15 minutos a fuego medio-bajo.
Añadimos las guindillas y dejamos que se haga otros 10 minutos. Agregamos el resto de azúcar y probamos por si hubiera que añadir más sal.
Sacamos una de las guindillas y el laurel y pasamos todo por la batidora. Lo dejamos que hierva de nuevo con el laurel y el pimentón unos 7 minutos más.
Si no os gusta que pique, no trituréis ninguna de las guindillas. Yo sólo he triturado una.
Esta salsa sirve para unas patatas fritas o cocidas, para acompañar un arroz rehogado, falafel, unas hamburguesas vegetales... ¡la imaginación al poder!
No hay comentarios:
Publicar un comentario